Con motivo del juicio que se está celebrando contra Garzón por realizar escuchas ilegales en el caso Gurtel, sus partidarios están proclamando que es una injusticia , un linchamiento que se esté juzgando y (muy posiblemente) condenando antes al juez que investiga la trama que a los propios acusados ,todavía presuntos. Cuando la realidad es que Garzón vulneró la ley de cuajo al realizar escuchas a los encausados estando éstos en prisión. Sólo en casos de terrorismo está permitido. Esto es tal cual, sin juicios de valor: que lo prohíbe la ley está claro y que Garzón realizó las escuchas también, él mismo lo ha admitido, otra cosa es que trate ahora de justificarlo.Sin embargo si los partidarios de Garzón montan más arenga que los que no lo son, si además les apoyan los medios de comunicación afines hoy mayoritarios y todo ello se aliña con los prejuicios ideológicos-emocionales que todavía anidan en buena parte de nuestra sociedad, bien pudiera ser que la realidad se transforme en una realidad virtual donde ésta cuestión quedaría como el hecho de una Ley inoportuna (maldita sea) que se interpuso en el camino del super juez Garzón , por Dios !! qué hacía ahí esa ley... !!. Pero no sólo es este caso, tenemos ejemplos de otras realidades virtuales que conviven a diario con nosotros, ej: cuando se habla de conflicto vasco en vez de terrorismo, cuando se dice identidad histórica y lingüística en vez de separatismo etc etc. Mientras nuesta sociedad ,con los políticos a la cabeza, no sea capaz de llamar a las cosas por su nombre vengan de donde vengan y estemos mareando la perdiz con eufemismos en el decir y en el hacer, viviremos en una realidad virtual con elementos que parecen de verdad pero no lo son . Y como tal realidad virtual el riesgo es que un día nos desenchufen de la red y desaparezcamos.